Cómo la independencia judicial y el Estado de derecho contribuyen a la prosperidad económica en América Latina: una perspectiva desde Nueva York

Ted Mayer, Integrante del Comité del Vance Center for International Justice, Hughes Hubbard & Reed 

Existen estudios que demuestran la relación entre un poder judicial estable e independiente, la inversión extranjera directa y el crecimiento económico. Como el socio director de un bufete internacional de abogados en la ciudad de Nueva York con más de un siglo de antigüedad, y como alguien que ha ejercido durante más de cuarenta años representando a clientes corporativos de todo el país y el mundo, esto no me sorprende.

En Nueva York somos muy conscientes que las empresas tienen la libertad de elegir dónde invertir y dónde establecer su domicilio. Nosotros competimos con otras ciudades del país y con otros centros financieros del mundo. Por esta razón, ha sido una prioridad para los tribunales, la abogacía organizada y la legislatura establecer a Nueva York como una jurisdicción donde prevalece el Estado de derecho en disputas comerciales, independientemente de la identidad de las partes.

La reputación para ser un lugar donde prevalece el Estado de derecho y la independencia judicial no se obtiene sin mucho trabajo. La historia nos recuerda que los tribunales de la ciudad de Nueva York tenían fama por sujetarse a influencia política, ser corruptos y politizados. Sin embargo, a través de la reforma en la selección de jueces y varios otros pasos a lo largo de los años, los tribunales se ganaron una reputación fuerte por su sofisticación, independencia, previsibilidad y equidad. Hoy en día, los tribunales de Nueva York son un ejemplo. Incluso, hay una ley en el estado de Nueva York (G.O.L. § 5-1401) que permite que las partes no residentes en Nueva York de una transacción comercial, elijan la legislación de Nueva York y sus tribunales para resolver controversias.

Algunos ejemplos de medidas que se han tomado incluyen que los candidatos judiciales son evaluados por colegios de abogados que representan una diversidad de especialidades y clientes. Hemos establecido una División Comercial con jueces que tienen experiencia en derecho comercial y son respetados por sus colegas. Por otro lado, para mantener a los jueces en altos estándares, contamos con un fiscal de distrito que es elegido popularmente que investiga activamente casos de corrupción. A finales de este año, una ex jueza presidenta de la División Comercial de uno de los distritos de la ciudad será juzgada por obstrucción de la justicia por  recibir miles de dólares en beneficios, incluido un viaje a Las Vegas, durante la investigación a una directora ejecutiva con quien fue amiga íntima.

Estos esfuerzos han tenido un papel muy importante para mantener a Nueva York como centro financiero y de negocios. Sin un sistema judicial justo, sería muy fácil que los bancos y otras empresas trasladen sus sedes a otras ciudades o países, con menos impuestos.

En mi experiencia personal como abogado, he confirmado las ventajas de trabajar en una jurisdicción que tiene una buena reputación de tener una judicatura independiente. Aunque hay mucha discusión acerca de la selección del derecho aplicable y la jurisdicción en una transacción, las contrapartes saben que cuando proponemos la ley y los tribunales de Nueva York, proponemos una jurisdicción predecible y justa. A su vez, cuando empresas que son nuestros clientes, consideran que los tribunales de otro estado de los Estados Unidos o de otro lugar del mundo están bajo la influencia de algún grupo en particular, inmediatamente hay un efecto en la voluntad de reconsiderar tener sus negocios en esa jurisdicción.

Lo que es cierto en Nueva York, que un poder judicial estable e independiente con autoridad real nos ha ayudado a prosperar, es cierto para otros lugares vecinos en el hemisferio. Expertos han verificado empíricamente la fuerte relación entre la integridad judicial y la Inversión Extranjera Directa (IED) en América Latina. Por ejemplo, un estudio de 2012 publicado por Joseph L. Staats y Glen Biglaiser en la revista académica International Studies Quarterly probó la hipótesis de que los países latinoamericanos con niveles más altos de independencia judicial y adherencia al Estado de derecho atraen una mayor cantidad de IED en comparación con los países que carecen de tales protecciones legales (p.194). El análisis de los autores, que incluyó 17 países de América Latina, incluyendo a Guatemala, midió la independencia judicial utilizando el puntaje de Estructura Legal y Seguridad de los Derechos de Propiedad del Instituto Fraser, que incorpora la independencia judicial, la imparcialidad de los tribunales, y la protección de los derechos de propiedad (p. 194 n.3, 195). Después de tomar en cuenta una serie de factores como el crecimiento del PIB, la apertura comercial, y la corrupción, los autores encontraron que la independencia judicial está sumamente correlacionada con la cantidad de IED, que viene de los Estados Unidos y de otras partes del mundo (p. 195-96).

Adicionalmente, una encuesta hecha por estos mismos autores a 66 directores ejecutivos de empresas estadounidenses con inversiones en América Latina encontró que la adherencia al Estado de derecho y la presencia de un sistema judicial eficiente y efectivo fueron elegidos como el primer y el cuarto factor, respectivamente, más importante entre 23 factores en total que se consideran al momento de decidir si se debe aumentar una inversión actual o comenzar una nueva (p. 196-200). Staats y Biglaiser demuestran que la independencia judicial respalda la confianza de los inversores porque una judicatura independiente puede evitar que actores gubernamentales expropien arbitrariamente la propiedad privada (p. 193). Además, un sistema judicial justo y eficiente proporciona un mecanismo eficaz para hacer cumplir los derechos contractuales sin tener que recurrir al arbitraje, y también apoya el crecimiento económico al aumentar la confianza en el Estado de derecho (p. 194). Como muestran estos estudios, la solidez e independencia del poder judicial guatemalteco es fundamental para la prosperidad futura de Guatemala.

Como solía decir mi viejo profesor de física que gozaba las demostraciones físicas: “Tener datos es bueno, pero tener datos más la experiencia es mucho mejor.” En mi experiencia, la importancia y el beneficio económico de un poder judicial independiente es imprescindible e innegable.